
Zona íntima masculina
Cada vez son más los hombres que deciden depilarse la zona genital, perianal, los gluteos y/o el surco interglúteo. Es una depilación segura, sin ningún efecto secundario, con muy buenos resultados gracias a que se trata de un vello grueso y muy pigmentado. Ofrece beneficios estéticos, de higiene personal y está demostrado que disminuye el riesgo de transmitir enfermedades, además de mejorar las relaciones sexuales.
Zona facial masculina
La depilación de la barba evita los problemas del afeitado y la irritación cutánea. Se puede hacer un tratamiento completo para la eliminación total del vello o sesiones sueltas para debilitar su cantidad y/o densidad. También se pueden tratar zonas más especificas como base de la barba, los pómulos, las orejas y el entrecejo, o bien toda la barba.
Las zonas faciales que más se depilan los hombres con láser son:
- La parte baja de la barba.
- El entrecejo.
- Los pómulos.
- La barba completa.
Sin embargo, a pesar de ser un pelo ideal para la depilación, la gran cantidad de pelo total que existe hace que el tratamiento requiera mayor número de sesiones que en otras regiones.
Espalda masculina
Tanto la espalda como el torso son zonas con un alto nivel hormonal, especialmente la parte superior de la espalda; por lo tanto, el crecimiento del vello es constante y continuo desde los 20 años hasta bien entrada la edad madura. Una vez terminado el tratamiento, si se desea tener la zona totalmente libre de vello, es muy probable que el hombre requiera una sesión de mantenimiento anual (preferiblemente antes de comenzar la temporada de verano, ya que la piel tiene un nivel menor de melanina y la potencia del láser puede ser mayor).
El hombre comienza a tener pelo en la espalda a partir de los 20 años y puede estar produciendo pelo nuevo hasta los 45-50 años. Así, el tratamiento eliminará el pelo que presente el paciente en el momento de la consulta, pero debe saber que seguirá fabricando pelo nuevo durante años y que será necesario realizarle sesiones de repaso. Esto mismo ocurre con los pelos que crecen en las orejas o en la nariz.